Pio XII, Franco and Fascism.

Nada de compasión, nada de amor hacia el vencido. Nada de lo que se pensaría de un buen cristiano. Pio XII, el día 1 de abril de 1939, día oficial del fin de la Guerra Civil Española manda un telegrama a Franco felicitándolo por su victoria. Contento, afable, celebra con Franco esa gran victoria del fascismo en España, telegrama al que Franco le responde inmediatamente con el mismo (y sincero) agradecimiento.

Pio XII, cuestionado y alabado por partes iguales ante su posición durante la II Guerra Mundial y la Alemania Nazi, declarado “venerable” por el papa de aspecto siniestro Benedicto XVI, apoyó sin fisuras el régimen de Franco, alabó su victoria y nunca se preocupó por el destino de todos esos republicanos, anarquistas, socialistas, comunistas (llamados para unificar en la memoria al enemigo como “rojos”), por su represión ni por su asesinato. Pio XII, el que nunca condenó el Holocausto (no ya el holocausto español, sino tampoco el más conocido, el judío) hace tras la lectura de este despreciable telegrama que algunos entiendan un poco más el llamado anticlericalismo, no justificable en ciertas facetas pero perfectamente comprensible en muchas otras.

Se puede decir que Pio XII en 1939 desconocía aún los asesinatos que se producían desde el bando nacional y la terrible limpieza y represión que durante su avance fue cometiendo, y por supuesto que no podía saber qué iba a suceder en los meses posteriores a esta victoria. Sin embargo, en 1953 Pio XII impuso a Franco el “Gran collar de la Orden Suprema de Cristo”. Otra muestras de la caridad de este Papa que va para beato.

Telegrama de PIO XII con fecha de 1 de abril de 1939 (extraído del periódico ABC, edición de 2 de abril de 1939)

SU SANTIDAD PIO XII FELICITA AL GENERALÍSIMO FRANCO.

Burgos. Su Santidad el Papa Pio XII ha dirigido al Generalísimo Franco el siguiente telegrama: “Levantando nuestro corazón al Señor, agradecemos sinceramente con V. E., deseada victoria católica España. Hacemos votos por que este queridísimo país, alcanzada la paz, emprenda con nuevo giro sus antiguas y cristianas tradiciones, que tan grande le hicieron. Con esos sentimientos efusivamente enviamos a V. E. y a todo el noble pueblo español nuestra apostólica bendición. PIO PAPA XII.